ArianeGroup ha presentado SUSIE, un estadio reutilizable para el transporte de astronautas y carga en el nuevo cohete Ariane 6. De esta manera, Europa entra, por sorpresa, en el mercado de transporte de astronautas, un mercado que parece que sólo acaparaba SpaceX, a parte de Rusia.
Durante esta semana, se está celebrando el evento IAC2022 en París, donde ArianeGroup ha presentado a SUSIE (Smart Upper Stage for Innovative Exploration), un escenario completamente reutilizable para el transporte de astronautas y carga. Este vehículo está desarrollado para ser compatible con Ariane 64 pero también con futuros lanzadores Ariane. SUSIE es un elemento que sustituirá al carenado presente en el cohete europeo, aportando una capacidad de carga de hasta siete toneladas en órbita terrestre baja.
La reutilización será posible gracias a un compartimento de motores que permite la retropropulsión en fase de actitud, por tanto mayor precisión que otros sistemas como los paracaídas. La misma serie de propulsores también permitirá actuar como un sistema de aborto en caso de emergencia. Este último es un requisito fundamental para la seguridad del transporte humano en el espacio.
12 metros de altura y 5 metros de diámetro
SUSIE está diseñado para ser compatible con Ariane 64 sin modificaciones particulares. El resultado de estas consideraciones es el tamaño, que alcanza los 12 metros de altura, 5 metros de diámetro, 40 metros cúbicos y una masa total de 25 toneladas para la versión de carga de SUSIE.
El tipo de misiones que pretende realizar ArianeSpace con SUSIE es muy variable, como el servicio y remolque de satélites ya en órbita o el repostaje de estaciones espaciales. ArianeSpace ha señalado que “SUSIE podría ser utilizado como cápsula para el transporte lunar, dada la posibilidad de añadir un módulo de servicio a la base”.
¿Un medio europeo de transporte de astronautas?
ArianeSpace afirma que SUSIE podrá albergar una tripulación de cinco personas y prestar servicio a las estaciones espaciales en órbita. El transporte humano sería un gran hito para el espacio europeo. De hecho, la cápsula sería el vehículo más deseado para proporcionar a Europa un acceso independiente al espacio para los astronautas. Este es un objetivo en el que la Agencia Espacial Europea (ESA) fracasó con la cancelación de la nave espacial Hermes a finales de la década de 1990.