Recientemente, el comando espacial británico ha anunciado un acuerdo bilateral con la fuerza espacial de los Estados Unidos. Dicha colaboración de la que aún no se conocen grandes detalles, habla de que “busca un acercamiento integrado a la protección y defensa de nuestros intereses en el espacio, así como el de nuestros aliados y socios”[1].

Esta colaboración, que llevaba tiempo forjándose (hay algunas noticias de 2021 que ya nos hablaban del tema[2]), es algo que entra dentro de los planes de la USSF de crear una red de alianzas y soporte para su misión. No obstante, el significado de ver a los Estados Unidos y Gran Bretaña unidos por la seguridad en el espacio, no deja de llamar la atención, sobre todo si se relaciona con el pasado que ambas potencias espaciales comparten. Y es que, si nos remontamos a los años 1960, veremos que estos dos países estuvieron implicados en el primer (y hasta el momento único) incidente entre dos naciones espaciales implicando un satélite y armas nucleares. Y si hablamos de armas nucleares detonando en el espacio.

Esta historia que os traigo hoy, habla de la prueba nuclear estrella de mar prime, el satélite británico Ariel 1 y como la demostración de una teoría física relevante para los sistemas antimisiles y antisatélite de estados unidos, provoco uno de los primeros incidentes internacionales en el espacio.

“La historia reciente ha demostrado el viejo principio militar de que, para cada nueva arma ofensiva, puede haber una defensa”- Así comienza el video propagandístico de Bell Systems que explicaba el primer sistema antimisiles estadounidense (Nike Zeus) en 1961[3]. Y es que el como defenderse de la nueva amenaza que implicaban los misiles balísticos, fue una de las primeras preocupaciones a las que se enfrentaron las fuerzas armadas estadounidenses en la década de los 1960. El sistema Nike-Zeus, usaba un misil de tres etapas con cabeza nuclear que podía subir a capas altas de la atmosfera, donde detonando la cabeza nuclear se esperaba destruir cualquier objeto que pasara por su radio de acción. Esta forma de eliminación por área, se vio que podía usarse no solo para misiles balísticos, sino también para eliminar satélites o lo que se encontrara a su paso[4]. Y esto sistema se empezó a teorizar a finales de 1957.

Hacia finales de 1957 y principios de 1958, el físico Nicholas Christofilos, que trabajaba en el Laboratorio de Radiación de Livermore en la Universidad de California, postulo la teoría que sería la base para los sistemas antisatélite y antimisiles como el Nike-Zeus. La teoría argumentaba, que una explosión nuclear en capas altas de la atmosfera, podía crear un cinturón de radiación artificial. El cual fue de interés para el departamento de defensa estadounidense por los efectos que podían tener en la disrupción de señales de radar o radiofrecuencia, así como la destrucción o degradación de componentes electrónicos necesarios para armar las cabezas nucleares de los misiles balísticos. Hay que recordar que, en 1958, gracias a Explorer I (el primer satélite estadounidense) se habían descubierto los cinturones de radiación alrededor de la tierra (nombrados cinturones de Van Hallen). Los cuales se creaban por la interacción de partículas solares con el campo magnético terrestre. Así pues, la teoría Christofilos, era de alto interés para el departamento de defensa en 1959, y hacía falta comprobarla a toda costa.

Figura explicando el recorrido de la radiación atrapada por el campo magnético en el informe de la operación ARGUS-C. B. Jones, M. K Doyle, L. H. Berkhouse, F. S. Calhoun, E. J. Martin, Operation Argus 1958.

Durante marzo y abril de 1958, se decidió diseñar una prueba nuclear con el solo objetivo de comprobar los efectos que la teoría Chritsofilos vaticinaba. Fue como surgió el proyecto ARGUS. El cual permanece hasta la fecha como uno de los test nucleares más secretos y más rápidamente ejecutados durante la Guerra Fría. El secretismo venia impuesto más que nada porque si los efectos de Chirtofilos eran ciertos, estos serían a escala mundial. Y por lo tanto cualquier nación que supiera del test, podría obtener datos significativos del experimento sin tener que llevarlo a cabo. En otras palabras, el test podía ser un regalo de información para potencias enemigas.

Fue así como en mayo de 1958 la operación ARGUS fue autorizada, y una serie de detonaciones nucleares se realizaron el atlántico sur. Las tres explosiones de entre 1 y 2 kilotones (baja potencia) se realizaron entre 323 y 1609 km de altitud. Por aquel entonces, los Estados Unidos habían lanzado también Explorer IV, que entre sus objetivos tenía el medir los posibles cinturones de radiación que ARGUS podía crear. Así gracias a las medidas de Explorer IV y cohetes sonda lanzados durante ARGUS, se demostró la existencia de cinturones de radiación artificiales creados por las detonaciones nucleares. A dicho efecto se le bautizo como el efecto Chritsofilos, en honor del autor que lo había predicho.

Tras ARGUS, le tocó el turno a la operación FISHBOWL (1962), que formaba parte de la operación DOMINIC[5]. La cual tenía diferentes pruebas nucleares, de las que FISHBOWL se centraba en las detonaciones en capas altas de la atmosfera. FISHBOWL se encargaría de estudiar los efectos Chirtofilos con detonaciones nucleares de mayor potencia. FISHBOWL se llevó a cabo en el pacífico, con lanzamientos de las cabezas nucleares en misiles NIKE ZEUS o THOR desde el archipiélago de Johnson y en un rango de altitudes de entre 30 a 400 km de altitud. De los 3 test planeados para FISHBOWL se pasaron a 5, por problemas y malfuncionamiento con los misiles que tenían que detonar las cabezas nucleares. Entre estos test, Starfish Prime fue el primero exitoso el 9 de Julio de 1972. Un misil THOR logró detonar una cabeza nuclear de 1.4 megatones a unos 400 km de altitud sobre el pacífico. La explosión se vio hasta desde Hawái a unos 1150 km de distancia. Donde durante 6 minutos la noche se hizo día. Las auroras creadas por la explosión duraron hasta 15 minutos tras la explosión expandiéndose por todo el pacífico. Pero la iluminación y las auroras no fueron su único efecto.

Secuencia de detonación de STRAFISH PRIME desde Honolulú (a unos 1150 km de distancia de donde se había lanzado en el atolón Johnston). Crédito: https://pearl-harbor-blast-zone.blogspot.com/2020/10/1962-atomic-rainbow-over-honolulu-was.html

En 1960, Reino Unido había comenzado su programa Ariel[6]. Que entre 1960 y 1980 produciría 6 satélites británicos. De los cuales los 2 primeros serian construidos por la NASA y los 4 últimos por organismos autóctonos de Reino Unido. El programa Ariel había surgido a finales de 1959 en el seno del COSPAR. Donde los estados unidos habían ofrecido al Science and Engineering Research Council (SERC) de reino unido, la ayuda para elaborar sus primeros satélites artificiales.  Así, Ariel 1, o UK-1, sería el primer satélite británico. Construido por la NASA, pero con cargas científicas, operaciones e interpretación de resultados a cargo del SERC. Ariel 1 fue lanzado a bordo de un THOR-DELTA el 26 de Abril de 1962. Su principal misión científica era la de obtener datos de la ionosphera terrestre.

Ilustración del satélite Ariel 1. Crédito: https://nssdc.gsfc.nasa.gov/planetary/image/ariel_1.jpg

Así pues, tras llevar un par de meses operando con normalidad, Ariel 1 se encontró con los efectos Christofilos de STARFISH PRIME. Y es que el impulso electromagnético, así como el cinturón de radiación de dicha explosión, fueron tan potentes que tuvieron sus efectos en la Tierra y el Espacio. En Hawái, equipos electrónicos se vieron afectados por el impulso electromagnético. Y en el espacio, el cinturón de radiación artificial creado comenzó a actuar contra todo satélite que lo atravesaban. El 13 de Julio de 1962, 4 días tras STARFISH PRIME, Ariel 1 era incapaz de generar suficiente electricidad para operar adecuadamente. El cinturón de radiación creado por STARFISH había afectado a los paneles solares no solo de Ariel sino otros satélites más que estaban orbitando en aquellas fechas. Incluido el primer satélite de telecomunicaciones comercial, Telestar 1 (que se lanzó un día después de la detonación de STARFISH PRIME). Ariel 1 no solo sufrió una degradación de sus paneles solares, sino también en la electrónica de control. Provocando problemas electrónicos intermitentes que durarían hasta septiembre de 1962. Fecha en la cual se declaró la operatividad de Ariel 1 como limitada. El seguimiento de Ariel 1 se interrumpiría en junio de 1964, y el satélite reentraría finalmente en la atmosfera terrestre en mayo de 1976.

Tras las pruebas de FISHBOWL, la fuerza aérea estadounidense instauro el Programa 437, segundo gran sistema Antisatélite que estuvo en servicio en Estados Unidos. El sistema emplearía un misil THOR con cabeza nuclear como principal elemento. No obstante, con la evolución de los tratados y actividades espaciales, en octubre de 1963, Kennedy firmo el tratado de limitación y prohibición de pruebas nucleares (CTBT)[7]. El cual entre otras cosas prohibía las pruebas nucleares en el espacio por los estados firmantes. Alejando así la posibilidad de otro incidente como el de STARFISH PRIME y Ariel 1 para el futuro de la exploración espacial.


[1] https://twitter.com/UKSpaceCmd/status/1515344794511421440

[2] U.K. Secretary of State for Defence, SMC leaders discuss the future of U.K.-U.S. Partnerships in Space- https://www.safia.hq.af.mil/IA-News/Article/2697158/uk-secretary-of-state-for-defence-smc-leaders-discuss-the-future-of-uk-us-partn/

[3] El video se puede ver en AT&T Archives: Nike Zeus Missile System – YouTube

[4] El gran miedo a un sistema FOBS (Fractional Orbital Bombardement System) fue una de las principales paranoias del ejericto estadounidense durante la guerra fira, y aun hoy en dia- Ver esta noticia como prueba- https://www.bbc.com/news/world-asia-59001850

[5] Para mas informacion consultar L Berkhouse, S. E. Davis, F. R. Gladeck, J. H. Hallowell, C. B. Jones, E. J. Martin, R. A. Miller,F. W. McMullarn, M. J. Osborne, Operation Dominic I-1962, Kaman Tempo, Defense Nuclear Agency, Washington, DC, 1983.

[6] Para mas informacion de Ariel 1 ver: https://www.spacelegalissues.com/ariel-1-the-first-british-satellite/ o ver https://nssdc.gsfc.nasa.gov/nmc/spacecraft/display.action?id=1962-015A

[7] https://www.un.org/disarmament/wmd/nuclear/ctbt/

By Ángel Félix Cuellar

Apasionado del espacio desde que era un crio, me forme como ingeniero técnico aeronáutico en la universidad politécnica de Madrid y graduado aeroespacial por la Universidad de León. Encontré trabajo en 2017 en ASD-Eurospace, la asociación de la industria espacial europea, lo que me ha permitido ir desarrollando mi conocimiento sobre el sector espacial no solo a nivel europeo sino también mundial. Actualmente soy estudiante del master en paz, seguridad y defensa del instituto Gutiérrez Mellado con la UNED, y desde octubre de 2021 conozco y sigo a Marta en Fuera de Órbita. Desde mis estudios hasta la actualidad he sido un gran apasionado de la relación del espacio con la seguridad y la defensa. Y como no con la militarización del espacio. Así que, gracias a Marta, y la gran oportunidad que representa poder colaborar con Fuera de Órbita, escribiré por estos lados sobre actualidad y pasado de ese gran elefante en la habitación: La militarización del espacio.

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